Los valores del deporte: ¿cómo nos hacen mejor persona?

01 Abril 2024
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El deporte, más allá de promover una afición saludable, puede ser una buena herramienta para potenciar los valores.
Educación y deporte

El deporte, más allá de promover una afición saludable y la pasión entre sus aficionados, puede ser una buena herramienta para potenciar los aspectos más positivos del ser humano, como: el respeto, la solidaridad o la deportividad.  

En el deporte todos somos iguales. Cada modalidad mantiene un reglamento básico e inalterable que, para que cumpla su función, debe aplicarse objetivamente. En el terreno de juego no existen las razas, las diferencias culturales o el poder adquisitivo, solo importa el esfuerzo del deportista y sus habilidades. Es por eso que, algunas de las acciones que mejor funcionan en los programas de integración social, suelen estar relacionadas con el deporte y la actividad física.  

Pero, el deporte no solo fomenta los valores de solidaridad e igualdad, también puede ayudarnos a entender muchos valores fundamentales para conseguir nuestros propios objetivos y crecer personal o profesionalmente, como: la disciplina, el compromiso o la constancia para conseguir un objetivo.  

¿Nos gusta el deporte porque nos atrevemos a retarnos a nosotros mismos? 

Si te das cuenta, en el deporte nos atrevemos a competir con todas nuestras armas y estrategias, a apostar, a arriesgarnos con decisiones atrevidas y dar rienda suelta a nuestras emociones. ¿Será por eso por lo que a muchos nos engancha? 

Hay muchos aspectos del deporte que pueden establecer similitudes con diferentes situaciones de la vida. Por ejemplo, en los deportes de equipo se compite por un objetivo en común, como en el trabajo, se establecen jerarquías, como en la sociedad, surgen conflictos de organización y mando, como en las familias o en la política, se dan intereses personales, como en la sociedad individualista en la que vivimos… solo los más hábiles, los que gestionen mejor sus emociones y los más constantes en su trabajo vencerán en competición. 

Otras veces, la “lucha” es contigo mismo, como ocurren en el fitness, disciplina en la que los atletas se preparan duramente para conseguir la mejor versión de sí mismos, y lo más curioso, es que no solo hablamos de físico, sino de una disciplina y fuerza de voluntad interiorizadas sin las que sería imposible alcanzar el objetivo. Lo mismo podría ocurrirle al que oposita sin descanso ocho horas diarias. Como ves, el mundo del deporte no dista tanto de la vida real.  

¿Cuáles son los valores deportivos que podemos aprender? 

Aprender de nuestros hobbies nos ayuda a interiorizar conceptos, valores y hábitos que podemos implementar en nuestro día a día. Con la actividad física aprendemos en entornos relajados y nos permitimos ser nosotros mismos:  

  • Disciplina: el deporte requiere de rutina y constancia para alcanzar metas a largo plazo. Aprender a establecer hábitos y a ser constante en el esfuerzo es esencial para alcanzar objetivos personales. 
  • Respeto: El deporte involucra trabajar con compañeros de equipo, entrenadores y árbitros. Sin respeto hacia las opiniones de los demás y hacia las decisiones de los superiores es imposible que ni el equipo ni los individuaos que lo forman alcancel en éxito.  
  • Persistencia: a veces puede ser difícil mantenerse firme y constante. El deporte nos enseña a lidiar con la frustración, a transformarla en nueva motivación y a seguir adelante. Igual ocurre en todas las facetas de la vida.  
  • Trabajo en equipo: Los deportes de equipo enseñan a colaborar con los demás para alcanzar un objetivo común. Aprender a trabajar en equipo puede ayudar a tener éxito en proyectos y en la vida diaria. 
  • Responsabilidad: Los deportistas tienen la responsabilidad de cuidar de su cuerpo, de ser disciplinados y de elegir pensando en lo mejor para su rendimiento. Igual ocurre cuando asumimos nuevos retos o cargos en nuestra vida personal. El compromiso es clave para llegar a buen puerto.  
  • Superación personal: ni te imaginas de lo que puedes ser capaz hasta que no lo intentas. El deporte es una vía perfecta para descubrir nuestras fortalezas y debilidades y para trabajarlas.  
  • Honestidad y juego limpio: el deporte tiene unas normas que promueven el juego limpio y el respeto por los demás. Aprender a jugar justamente, sin trampas, sin pisar a los demás y conseguir tus metas por tus propios méritos es lo que en la vida te dará esa paz mental y sentimiento de autorrealización que tanto perseguimos los humanos. 

¿Cómo influye la actividad deportiva en el sector de la educación? 

Inculcar desde la infancia un estilo de vida saludable y activo es esencial para el desarrollo de las personas. Por otro lado, es importante que el deporte en la escuela no solo se enfoque desde el punto de vista de la salud, sino también para trabajar el bienestar mental y el asentamiento de valores éticos que se puedan revertir en la sociedad una vez que los alumnos lleguen a la edad adulta.  

Fomentar el deporte en los centros educativos es una decisión muy acertada que mejora muchos aspectos: 

  • Evita la obesidad infantil y los problemas de sobrepeso 
  • Los niños aprenden a realizar determinadas actividades por si solos que les aportarán autonomía para su vida diaria. 
  • Previene de la ansiedad y mejora los niveles de estrás, así como la concentración. 
  • Se aprende a trabajar en equipo y a colaborar por un objetivo común. 
  • La depresión, la ansiedad y los trastornos del sueño se ven reducidos. 
  • Los niños aprenden a comunicarse con otras personas que no están en su círculo más próximo. 
  • Desarrollan nuevas habilidades motrices. 
  • Aprenden a gestionar sus emociones, sobre todo, la frustración. 
  • Prepara a los niños para la convivencia 
  • Se entrena la disciplina y la perseverancia. 

Como ves, el deporte nos reporta grandes beneficios desde que somos unos niños hasta que alcanzamos la tercera edad. Lo más importante es asumir el hábito y trabajar por la mejora constante.  

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