Los ejercicios de rehabilitación son un componente esencial en la recuperación post lesión de los atletas y profesionales del deporte, pues a lo largo de una carrera profesional deportiva, pueden surgir todo tipo de lesiones.
Generalmente, estos ejercicios se centran en restablecer la funcionalidad, fuerza y flexibilidad afectadas por una lesión. La terapia física se emplea para diseñar programas específicos que ayuden a sanar el cuerpo, minimizando el riesgo de recaídas y mejorando la capacidad física. Estos programas suelen incluir una combinación de ejercicios de estiramiento, fortalecimiento muscular, equilibrio y coordinación para restaurar gradualmente la condición física óptima y la capacidad de rendimiento deportivo.
Es crucial seguir rigurosamente las indicaciones del profesional de la salud y el entrenador, ya que estos ejercicios están adaptados para cada lesión y para garantizar una recuperación completa y segura.
Tipos de ejercicios de rehabilitación
Existen diversos tipos de ejercicios de rehabilitación para tratar diferentes lesiones y conseguir objetivos variados. A continuación, se exponen algunos de los más aplicados a dolencias y lesiones que aparecen en cualquier modalidad.
Ejercicios para el fortalecimiento muscular
Estos ejercicios se enfocan en fortalecer los músculos alrededor de la zona lesionada para proporcionar estabilidad y soporte. Por ejemplo, realizar elevaciones de talón para fortalecer los músculos de la pantorrilla después de una lesión en el tendón de Aquiles.
Ejercicios de movilidad articular
Buscan mejorar la amplitud de movimiento de las articulaciones afectadas. Por ejemplo, realizar movimientos circulares con el hombro para mejorar la movilidad después de una lesión en esa zona.
Ejercicios de estiramiento
Estos ejercicios ayudan a aumentar la flexibilidad muscular y reducir la tensión en los tejidos afectados. Un ejemplo sería realizar estiramientos de los isquiotibiales para mejorar la flexibilidad después de una distensión muscular.
Ejercicios de bajo impacto
Se centran en mantener la actividad física sin someter a la zona lesionada a un estrés excesivo. Por ejemplo, nadar o realizar ejercicios en bicicleta estática para mantener la actividad cardiovascular sin sobrecargar las articulaciones después de una lesión en las piernas.
Entrenamiento de equilibrio
Estos ejercicios buscan mejorar la estabilidad y el control corporal, lo que es crucial para prevenir nuevas lesiones. Por ejemplo, realizar ejercicios de equilibrio en una pierna para fortalecer los músculos estabilizadores después de una lesión en el tobillo.
Ejercicios para la mejora de la flexibilidad
Se centran en aumentar la elasticidad muscular y mejorar la capacidad de movimiento en las articulaciones. Un ejemplo sería realizar yoga o Pilates para mejorar la flexibilidad general del cuerpo después de una lesión.
Ejercicios de resistencia
Estos ejercicios buscan mejorar la resistencia muscular y cardiovascular sin sobrecargar la zona lesionada. Por ejemplo, realizar ejercicios de resistencia con bandas elásticas para fortalecer gradualmente los músculos después de una lesión.
¿Qué es la rehabilitación funcional?
La rehabilitación funcional es un enfoque integral y específico que busca restaurar la capacidad de una persona para llevar a cabo actividades cotidianas y funcionales después de una lesión, enfermedad o cirugía. Se centra en mejorar la funcionalidad, coordinación, fuerza y movilidad del individuo, adaptando programas de ejercicios y terapias para recuperar la autonomía y calidad de vida, permitiéndole reintegrarse a sus actividades diarias de manera óptima.
Rehabilitación neuromuscular
Una lesión neuromuscular es el daño o trastorno que afecta la comunicación entre el sistema nervioso y los músculos, pudiendo involucrar a los nervios, la médula espinal o el propio músculo. Estas lesiones pueden ser el resultado de traumas, enfermedades, trastornos genéticos o degenerativos y se manifiestan como debilidad muscular, pérdida de control motor, espasmos, entumecimiento, falta de coordinación o incluso parálisis en algunos casos, debido a una interrupción en la señal entre los nervios y los músculos.
La rehabilitación neuromuscular es un proceso terapéutico que se enfoca en la recuperación de las conexiones entre el sistema nervioso y los músculos después de lesiones o trastornos neurológicos. Este enfoque integral utiliza ejercicios específicos, técnicas de estimulación nerviosa, y terapias para mejorar la comunicación entre los nervios y los músculos, restaurando así la función muscular, la coordinación motora y la movilidad en pacientes.
Entrenamiento de propriocepción
El entrenamiento de propriocepción se considera parte del entrenamiento neuromuscular. Se centra en la relación entre el sistema nervioso y los músculos, con el objetivo de mejorar la capacidad del cuerpo para percibir, interpretar y responder a las señales sensoriales que provienen de las articulaciones, músculos y tendones. Este tipo de entrenamiento busca fortalecer esta conexión, mejorar la coordinación, el equilibrio y la estabilidad, elementos fundamentales para prevenir lesiones y optimizar el rendimiento físico.
